En 1902 Klimt creó uno de sus trabajos más conocidos para una exposición del movimiento secesionista: El friso de Beethoven.
Toda la exposición fue un homenaje a Ludwig van Beethoven. El monumental friso de Klimt daba la bienvenida a los visitantes que cruzaban la entrada del edificio. Esta ornamental y opulenta sinfonía, en la que Klimt pretendió inmortalizar la "novena" de Beethoven y la interpretación que hizo Richard Wagner de ella, cuenta con 34 metros de ancho y dos metros de alto.
No solo los contemporáneos de la época quedaron impresionados por esta obra. El mundo entero lo sigue estando en la actualidad. En un principio este ciclo debía ser desmantelado una vez acabara la exposición. Un coleccionista lo compró en 1903, lo quitó de la pared y lo dividió en siete piezas. En 1973 la República de Austria compró la valiosa obra, la restauró y en 1986 la expuso al público en una sala de la Secesión especialmente creada para ello.
Al igual que en tiempos de Klimt, la Secesión sirve actualmente para acoger arte contemporáneo en diversas exposiciones, que se puede contemplar en diversas visitas guiadas (si se desea, también junto con el Friso de Beethoven). En la tienda del museo puede adquirir, además, simpáticas reproducciones de diversos detalles del friso, así como libros sobre Gustav Klimt.
Overview tour every Saturday, 11 a.m. in English or individual visit with an audioguide (German, English, French, Italian, Polish, Serbian, Spanish, Turkish). Savings: 3€
People with disabilities pay the discounted admission price, companions enjoy free admission. Audio guide free with the Vienna City Card
Observaciones
Main exhibition rooms accessible by elevator. Access to all exhibition rooms: elevator. Elevator: door width: 80 cm, cabin depth: 105 cm, cabin width: 80 cm. Beethoven Frieze (basement): elevator. Drawing Room: 24 steps.