Cuando las sillas y las mesas empiezan a colocarse delante de los cafés o las tabernas, quiere decir que el verano no puede andar demasiado lejos. Las primeras terrazas estilo Schanigarten se ponen durante los primeros días cálidos de la primavera. Oficialmente, la temporada da comienzo el 1 de marzo y dura hasta el 30 de noviembre.

El Schanigarten es una característica distintiva de Viena, y no se puede considerar una terraza del montón. Una característica especial del Schanigarten es que se encuentra en espacio público, habitualmente en zonas peatonales, las aceras o en el espacio libre de un parque, pero siempre cerca al local al que pertenecen. En total, los vieneses tienen alrededor de 3500 Schanigarten.

Mostrar todas las imágenes

1 /de 2

2 pictures

en los que disfrutar del buen tiempo. Maceteros y plantas frondosas llegan sustituyen las vallas del jardín y las sombrillas arrojan una sombra refrescante. Si hace frío, los camareros traen cálidas mantas. Desde luego, estar a la vista tiene un papel importante en todo esto; quien pasa, se piensa si plantea hacer una breve pausa, mientras los que ya se han sentado disfrutan viendo pasar al resto de viandantes.

El primer Schanigarten vienés "oficial" lo inauguró Johann Jakob "Gianni" Taroni. En el año 1750 recibió la autorización que le permitía poner sillas y mesas delante de su local, en el Graben del centro de la ciudad. Es de este Schanigarten del que probablemente derivó también el nombre. "Jean", o "Schani", es la abreviatura vienesa del nombre de pila de Taroni, Johann. Otros, sin embargo, afirman que la palabra deriva de la antigua forma en que se llamaba a los aprendices de camarero, porque antes solía decirse "Jean" o "Schani": Schani, trag' den Garten hinaus ("Schani, pon la terraza fuera").

Mostrar todas las imágenes

1 /de 3

3 pictures

Plazas pintorescas

Las terrazas, o Schanigärten, son lo más bonito que tienen las plazas públicas, y la pintoresca St.-Ulrichs-Platz es un buen ejemplo de ello. Una iglesia barroca, suelos de adoquines, una plaza rodeada por casas antiguas y el famoso Schanigarten de Ulrich y Erich, comida deliciosa y buenas bebidas son los ingredientes que conjuran un encanto mediterráneo.

El ambiente de la idílica Piaristenplatz no es muy diferente, donde algunos árboles prestan el cobijo de su sombra cerca de la iglesia piarista de Viena, la Piaristenkirche. El lugar más cómodo es el restaurante Il Sestante, cuya cocina italiana permite sumergirse en la atmósfera del bel paese.

El encanto romántico flota en los pequeños callejones del barrio estilo Biedermeier de Spittelberg. El bonito Schanigarten del restaurante Witwe Bolte tiene cocina típica vienesa, mientras el Tian Bistro está especializado en cocina vegetariana.

Mostrar todas las imágenes

1 /de 2

2 pictures

La parte más central de la Praterstraße se ha convertido en una de las calles de Schanigärten más bonitas de la ciudad. Aceras anchas, sembradas de árboles que proyectan una sombra agradable, poco tráfico y un par de Schanigärten que invitan a sentarse a sus mesas. El Café Ansari y su cocina georgiana linda directamente con el Schanigarten del Mochi, en cuyos fogones se preparan deliciosos platos japoneses. El Ramasuri tiene sillas coloridas para sentarse al aire libre, y desde donde puede admirarse el monumento a Nestroy.

En una de las plazas más antiguas de Viena –el algo escondido Schulhof– está el Schanigarten del restaurante Zum Finsteren Stern. Aquí volvemos a encontrar un Schanigarten enmarcado en un escenario con iglesia, edificios antiguos, adoquinado y árboles. El mirador o Schanigarten del restaurante Lucullus es precioso y está preparado con mucho cariño. Se trata de un espacio cobijado por sombrillas y una densa vegetación de flores, hierbas y plantas grandes, donde además se sirve buena cocina de inspiración mediterránea.

Consejos para encontrar terrazas escondidas